Un equipo de cuatro veterinarios de España e Italia ha logrado un hito en la cirugía animal al publicar, por primera vez a nivel mundial, una descripción detallada de la técnica y los resultados del cierre de shunts extrahepáticos mediante laparoscopia. Este avance se ha presentado en un número amplio de pacientes y ha sido destacado en la revista Veterinary Surgery, reconocida como una de las publicaciones más prestigiosas en el ámbito de la cirugía veterinaria.
El shunt extrahepático es una afección vascular que provoca un flujo sanguíneo anómalo entre dos venas principales, comúnmente entre la vena porta y la cava. Esta anomalía permite que las toxinas que deberían ser procesadas por el hígado entren directamente en la circulación sanguínea, lo que puede causar encefalopatía hepática, una condición potencialmente mortal para los caninos. La enfermedad puede ser congénita o adquirida, siendo más frecuente en razas pequeñas o toy como el Yorkshire, el Bichón maltés, el Carlino y el Schnauzer. Entre las consecuencias más graves se encuentran problemas neurológicos severos.
“Los signos clínicos más habituales son la pérdida de apetito, vómitos, hinchazón abdominal, y comportamientos inusuales, como caminar en círculos o apoyarse la cabeza en la pared, así como temblores y ceguera. Estos síntomas suelen aparecer tras las comidas, cuando aumenta el nivel de amoniaco en la sangre”, explica David García Rubio, veterinario y coautor del estudio. La detección temprana de la enfermedad es crucial, ya que, dependiendo de la acumulación de toxinas, pueden presentarse síntomas que van desde desorientación hasta coma en etapas avanzadas.
El único tratamiento viable para esta afección es quirúrgico. El proceso implica la instalación de un dispositivo que cierra el shunt de forma progresiva, normalizando así el flujo sanguíneo. La introducción de la laparoscopia en esta cirugía ha demostrado ser revolucionaria, ya que no solo simplifica el procedimiento, sino que también presenta una serie de beneficios significativos para los pacientes. Esta técnica reduce el período de recuperación, minimiza el dolor postoperatorio, disminuye la necesidad de medicación y elimina la necesidad de utilizar un collar isabelino, lo que puede resultar en una experiencia menos estresante para el animal.
Este estudio marca un avance valioso en la medicina veterinaria y destaca la importancia de la colaboración internacional para mejorar los tratamientos y la calidad de vida de los animales. Con los nuevos enfoques quirúrgicos, se abre un horizonte de esperanza para los perros afectados por esta grave condición, mejorando sus pronósticos y ofreciendo nuevas posibilidades de tratamiento en el futuro.
Paquitomoreda says:
M
Susana says:
Avances en la medicina canina… ¡qué importantes son!. La investigación es necesaria para seguir aprendiendo sobre estos seres tan extraordinarios.