El cannabidiol, conocido como CBD, es un compuesto activo que se encuentra en la planta de cannabis, específicamente en la especie Cannabis sativa, que incluye tanto el cáñamo como la marihuana. A diferencia del tetrahidrocannabinol (THC), que es el componente psicoactivo de la marihuana, el CBD se ha destacado por sus propiedades terapéuticas. Su uso ha ganado popularidad como un tratamiento alternativo para el alivio del dolor, tanto en medicina humana como en veterinaria.
La planta de cannabis contiene una variedad de cannabinoides, y el CBD ha demostrado ser efectivo en el tratamiento de dolores crónicos y diversas enfermedades. Este interés en el uso del CBD se basa en su capacidad para interactuar con el sistema endocannabinoide (SEC) presente en todos los perros.
Los fitocannabinoides como el CBD estimulan el sistema endocannabinoide, activando receptores específicos (CB-1 y CB-2) que regulan diversas funciones del sistema nervioso central, el sistema inmune y varios órganos. Estos receptores tienen un impacto significativo en procesos fisiológicos tales como la inflamación, el manejo del estrés y la ansiedad, el apetito y las emociones. Dado que los perros también producen endocannabinoides, se ha observado que responden de manera similar al CBD, lo que hace que sea un tratamiento prometedor para nuestros compañeros peludos.
La medicina veterinaria ha evolucionado notablemente, ofreciendo tratamientos más efectivos y mejorando la calidad de vida de nuestras perros. Sin embargo, muchos medicamentos convencionales pueden tener efectos secundarios indeseables, como impactos negativos en el sistema inmunológico y digestivo, así como daños en órganos vitales como el hígado y los riñones.
En este contexto, el uso del CBD como terapia alternativa ha surgido como una opción esperanzadora para el tratamiento de diversas afecciones en perros. Aunque la investigación continúa, el CBD podría ofrecer un enfoque más seguro y eficaz para mejorar el bienestar de nuestros perros.
1. Alivio del dolor: El CBD ha demostrado ser eficaz en el tratamiento de dolores crónicos en perros, como los de espalda y discopatías.
2. Control de convulsiones: En perros con epilepsia idiopática, el CBD puede ayudar a reducir la frecuencia y la intensidad de las convulsiones.
3. Propiedades antiinflamatorias: El CBD es reconocido por su capacidad para disminuir procesos inflamatorios, lo que lo convierte en un tratamiento alternativo valioso para afecciones como la artritis.
4.Tratamiento en cáncer: Aunque la investigación está en etapas iniciales, se espera que el CBD pueda ayudar a aliviar síntomas asociados al cáncer y sus tratamientos, como las náuseas provocadas por la quimioterapia.
Un estudio realizado por el Baylor College of Medicine en Texas encontró que el CBD puede reducir la producción de moléculas inflamatorias relacionadas con la artritis en perros.
Los formatos más comunes de CBD en la medicina veterinaria son el aceite de CBD y las golosinas con aceite de cáñamo. Sin embargo, el aceite líquido es preferido por su facilidad de dosificación y rápida absorción. Para garantizar la seguridad de los perros, el aceite de CBD se elabora a partir de extracto de cáñamo, que es rico en cannabidiol y contiene bajas concentraciones de THC (menos del 0,05%).
Es fundamental evitar el uso de productos de cannabis destinados a humanos, ya que pueden contener dosis peligrosamente altas para los perros.
El aceite de CBD está disponible en diferentes concentraciones y presentaciones. Siempre es recomendable consultar con un veterinario para determinar la mejor opción y dosis para cada perro.
La falta de datos específicos sobre las dosis adecuadas de CBD para perros ha llevado a los veterinarios a utilizar la observación para ajustar la dosificación. Este enfoque permite adaptar el tratamiento a las necesidades individuales de cada perro.
Si bien aún queda mucho por investigar, el CBD y otras terapias alternativas tienen el potencial de jugar un papel crucial en la mejora de la calidad de vida de nuestras perros en un futuro cercano.
Susana says:
Investigación es la clave para conseguir avances y descubrimientos en terapias, como en este caso con el CBD, que ayuden a los perretes en sus enfermedades.